- Si quieres ser un erudito, habla en un idioma que nadie entienda, pero si quieres llegar al corazón de la gente, háblales en su idioma.
- La perfección no se consigue cuando no hay nada más para cambiar, sino cuando si cambiamos una sola cosa, lo cambiamos todo.
- Si quieres molestar a tus enemigos, sólo debes ser condescendiente y comprensivo con ellos.
- Tu grado de sabiduría estará marcado por tu habilidad para evitar que aparezcan los problemas.
- Para que la vida realmente merezca la pena ser vivida, debe ser analizada, pero nunca resuelta.
- La verdad merece la pena ser buscada con dedicación, pero debemos tener la precaución de asegurarnos de no encontrarla jamás.
- Es la visión de nuestro futuro lo que nos convierte en personas responsables.
- Cuánta más adaptabilidad tienes, más inteligente eres.
- La persona inteligente de verdad no tiene necesidad alguna de esforzarse en demostrar su inteligencia.
- El sentido de la vida es aceptar que la ignorancia es lo que más nos caracteriza.
- La verdadera fuerza no yace en los músculos, sino en una voluntad inquebrantable.
- Callar oportunamente dice más que hablar intempestivamente.
- Un triunfador puede fracasar, pero nunca abandonar.
- No seas tan poco inteligente como para llorar por quien no merece tus lágrimas.
- En el amor debe haber inteligencia y en la inteligencia no puede faltar el amor.
- Tu peor enemigo no tiene el poder de dañarte tanto como el que tienes tú mismo.
- Para cambiar el mundo, es imprescindible compartir parte de tus pensamientos, pero guardarte otra sólo para ti.
- Ten cuidado de no dedicar demasiado tiempo a aprender cómo vivir, ya que sólo estarías aprendiendo cómo morir.
- El camino hacia la sabiduría parte de la conciencia de la ignorancia propia.
- Se deteriora más el cerebro por la falta de uso que por el uso extremo que le podamos dar.
- La humildad te llevará a ser un verdadero sabio y la sabiduría no lleva a otra cosa que al poder.
- Oportunidad es el nombre que los optimistas le dan al futuro.
- Existe una peligrosa tendencia a creer todo aquello en lo que queremos creer.
- Si ves la sombra es porque estás de espaldas al sol.
- La felicidad es mantenerse fiel a tus propios principios, no cumplir todos tus deseos.
- Si has sido bendecido con el don de la inteligencia, entonces te rodearás de gente más inteligente que tú.
- No puedes enseñar nada a nadie sin antes inculcar en el otro el deseo de aprender.
- Es más fácil lastimar a quien amas que a quien odias.
- Las heridas de amor son la señal más clara de que nunca hubo verdadero amor.
- No puedes cambiar tus principios porque no le gusten a quienes te rodean; cambia las personas a tu alrededor.
- Cuando los efectos son demasiado drásticos, las causas permanecerán ocultas.
- Tu propia mente te encarcela más que tu destino.
- Cuando intentas reencauzar a quien ya ha elegido su camino, corres el riesgo de arruinar una vida y perder una amistad.
- La mejor forma de tener muchas vidas es tratar a las diversas situaciones de tu vida como si fueran de vida o muerte.